En el pleno de octubre se aprobaron los presupuestos para 2019 con el voto negativo de todos los partidos de la oposición y gracias a la abstención de uno de los concejales del grupo de Veïns de Sant Feliu simplemente para visualizar la ruptura interna que tienen.
Mi intervención fue la siguiente:
El año pasado mi voto fue una abstención preocupada por la excesiva dependencia con la construcción que tenían las cuentas del ayuntamiento. Este año la preocupación no se ha disipado.
Los presupuestos no presentan déficit, cumplen el objetivo de estabilidad presupuestaria, cumplen la regla del gasto y el cálculo del ahorro y la capacidad de endeudamiento están dentro de los límites establecidos. Faltaría más que se presentaran unos presupuestos que no cumplieran con los requisitos que la ley exige.
Ustedes hablan de contención presupuestaria, pero es sólo un trampantojo. Lo que ha disminuido son las inversiones, del capítulo 1 al 5 (las operaciones corrientes) ha aumentado un millón y medio de euros en gastos y 1.200.000 en ingresos. Así que de contención poca vemos. Sólo que esta vez los señores de ICV han tenido algo más de vergüenza y no han presentado los presupuestos de un año electoral con una sobredimensión en el capítulo de inversiones como sí hicieron en 2015.
Como cada año nos hemos fijado en la recaudación del IBI y por lo que nos presentan en 2019 volverá a aumentar la recaudación a pesar de que el tipo impositivo está congelado. El aumento de recaudación viene por el incremento del padrón, un año más. Quizá viendo que cada año se va a aumentar la recaudación estaría bien que se bajara alguna vez el tipo para hacer que la mejoría en las cuentas públicas por el crecimiento de la ciudad lo vieran los ciudadanos alguna vez reflejado en sus recibos.
La recaudación por las plusvalías sigue aumentando y no nos olvidamos que este impuesto ha sido fuente de diversas resoluciones judiciales y que sigue siendo posible que haya una modificación normativa que podría cambiarnos esta previsión. Pero no puedo dejar de mencionar que me alegro que después de varios años ya no tenemos que hablar de la plusvalía de la Cemex como elemento de duda razonable cuando nos toca el debate de presupuestos.
Nos dicen que seguirá aumentando la recaudación por tramitaciones de obras mayores este año un 11,58% más. Y volvemos al mismo problema que vi el año pasado, estamos aumentando los gastos a la vez que los ingresos siendo éstos de naturaleza incierta en un medio plazo al venir de la construcción. ¿Qué haremos cuando en unos 3 o 4 años no queden solares urbanizables en Sant Feliu?
No son unos presupuestos ni mejores ni peores que el año pasado, siguen siendo unos presupuestos que gracias a la buena marcha de la economía se pueden aguantar, pero este año el voto será negativo, y el motivo es simple, el Partido Popular no puede ser muleta de un gobierno que ignora a la mayoría de santfeliuencs y hace guiños para contentar a los partidos independentistas como fue colgar un lazo amarillo en la fachada de nuestro ayuntamiento violentando claramente la obligada neutralidad política de la administración pública. No podemos dar un voto de confianza a un gobierno que lleva más de 10 meses sin hacer cumplir las ordenanzas y deja que aún haya carteles electorales del 21 de diciembre de 2017 en algunas zonas de Sant Feliu.
No podemos sustentar a un gobierno que lleva desde septiembre sin limpiar de lazos amarillos las farolas de sitios tan poco escondidos como la carretera Laureà Miró, o la misma plaza de la vila. Me pregunto cuánto durarían gaviotas azules colgadas de las farolas.
No vamos a dar aire a un gobierno que no me responde las instancias que presento por registro electrónico de manera sistemática. Por poner un ejemplo pregunté en mayo por el estado del parque infantil de la plaza Falguera y aún no he recibido respuesta por la vía que elegí ser contestada.
Y no vamos a dar alas a un gobierno que facilita a los independentistas leer un manifiesto con sus proclamas utilizando los medios técnicos que son públicos y que por lo tanto deberían no ser utilizados para dividirnos aún más.
No pueden pedirme que yo les permita aprobar unos presupuestos con mi abstención si ustedes nunca hacen ningún gesto para los 1.400 y pico de ciudadanos que este humilde grupo municipal de una sola concejal representa.
PP Sant Feliu de Llobregat 
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